Archivo Arquidiocesano.
Información para Iglesia Diocesana. Programa Radial FM Corazón. 2012
La zona de bajada grande fue la elegida por los primeros pobladores cuando en el siglo XVII, Santa Fe Capital debió ser trasladada de su primer emplazamiento en las cercanías de Cayastá hacia su actual lugar. Era también el sitio en el cual los viajeros que se dirigían a Corrientes o al Paraguay hacían pie para continuar por el camino de la margen izquierda del Paraná. Cuando se construyó el fuerte en el lugar que actualmente ocupa la plaza 1º de mayo la población comenzó a concentrarse alrededor de éste, quedando la bajada como un desembarcadero que con el correr del tiempo se volvió un importante puerto para la comunicación de la ciudad. El 16 de Octubre de 1896 se inauguró un muelle construido por la empresa del FFCC Central de Entre Ríos (ahora FFCC Gral. Urquiza).
El movimiento portuario se acrecienta sobre todo por la exportación de cereales, llegando a trabajar 100 personas por día en el cargamento de los barcos. Se acrecentó la población y fue necesario la creación de la escuela primaria en 1895 y en 1899 la estafeta de correos.
Con la habilitación del Puerto Diamante para buques de ultramar y la instalación de una línea férrea, nuestro puerto fue perdiendo su actividad. Tiempo después la nación lo va a expropiar para los ferrocarriles.
En noviembre de 1916 el Padre Juan Pérez, de la orden de los Agustinos le informa al vicario General David Luque que durante 8 días se ha llevado a cabo la misión religiosa en el Barrio de Bajada Grande y que todos los años se acostumbra a dar. Este año como en los anteriores han ayudado en tan santa tarea las señoras Vicentinas, Ana de Arigos, María Z. de Ortiz, María C. de Parera, Lola Velazquez y María Judith Zavalla Carbo. Todas dignas de elogio por el celo puesto en atraer gente a la misión para enseñar la doctrina, dar consejos a las personas cuyos hogares no estaban bendecidos a fin de que regularicen su estado. La asistencia fue más crecida de lo que se creía pudiendo contar todos los días con unas 250 a 300 personas. Fruto de esta misión fueron 150 confesiones, 20 primeras comuniones, 21 bautismos y 4 matrimonios.
El 21 de octubre de 1916 van a contraer matrimonio en la Parroquia San miguel y fruto de esta misión los matrimonios de Tomas Morales, natural de Nogoyá y domiciliado en Bajada Grande y Maclovia Ávila, natural de Bajada Grande y van a legitimar a sus hijos Tomas, Maclovia Eulalia y Esteban. Libro 3 folio 67 de San Miguel, Vicente Herrera y Carmen Sosa, el mismo día y legitiman a su hija Paulina; Saba Morel y Petrona Godoy y son sus hijos Catalina, Fernando, Juana Josefa, Salvador. Y por ultimo Francisco Romero e Isidora Ríos, sus hijos Mercedes, Heraclio, Marcos, Damian, Benito, Eugenio y Sixto. Todos el mismo día y por el Padre Juan Pérez.
El 27 de septiembre de 1927 se hacen cargo de la parroquia San Miguel los padres Claretianos, misioneros del Corazón de María. Van a celebrar misa y bautizar en los galpones de Bunge y Born destinado al depósito de cereales, cerca de la estación del ferrocarril y en la carbonera del ferrocarril. Dicen que colocan toldos de lona y usan los durmientes como bancos. Preparaban el altar con una mesa con adornos de flores naturales atadas con piolín formando guirnaldas.
Entre el 30 -31 el Padre Marcelino Carrera , los domingos llegaba en el tren de las 11 de la mañana, celebraba la misa, daba catequesis en una habitación de una casilla de madera que le prestaba la familia de Pascual Peralta que se la había prestado un señor Arregui. Cuenta la historia que un día pasaban los misioneros por el camino del río y le pidieron a él un lugar para dar la misa, eran el Padre Albarracín y Marcelino Carrera, les ofreció esa habitación al fondo de su hogar. El padre venia una vez al mes al principio, se quedaba en la fonda de Bruna Mendizabal de Eguren y Antonio Eguren, casa que quedo sumergida en la laguna. Comenzaron a pensar en un terreno para construir un templo y eligieron un terreno baldío que rodeaba la casa de Peralta.
Los inmigrantes yugoslavos que no conocían el idioma se reunían allí después del trabajo cantando las canciones de su patria, bailando y especialmente pidiendo la protección de la Virgen.
El 6 de febrero de 1933 se da inicio a las obras de la capilla. La construcción fue efectuada por gente que venia de Paraná. El constructor fue Juan Schonfeld y trabajo gente de bajada contratada para el acarreo de agua desde la costa en tachos. La piedra fundamental consistió en una caja conteniendo papeles con las intenciones espirituales para la zona.
El 12 de marzo de 1933 se inaugura la capilla del Corazón de María con la presencia de Mons. De Carlo, el párroco de San Miguel Pbro. Oromi y el padre Marcelino que estaba preparando todo para este momento.
Las personas que explotaban las canteras colaboraron con sus peones, entre ellos Víctor Vuconich y Gregorutti, que ese día le dieron feriado a su personal para que todos pudieran asistir. La gente concurrió con sombreros y vestidos de fiesta, muchos niños recibieron la confirmación y primera comunión.
El altar estaba ubicado en el centro del presbiterio y una grada separaba este lugar del resto del templo. Por sobre el altar se encontraba la actual Virgen Mostrando su corazón inmaculado, a la derecha la imagen del Corazón de Jesús y a la izquierda la imagen de San José.
A dos años de inaugurada la capilla Don Juan Costa, padrino de la imagen de la virgen, gano el premio mayor de la lotería y donó el importe para el revoque exterior del templo.
Entre el 34 y 35 se convierte en un centro catequístico. Toda la información de la capilla se refiere a ese tema.
El 31 de octubre de 1935 hay una reunión de vecinos en que se constituye provisoriamente una Comisión Pro Continuación de las líneas del Ferrocarril y Puerto Exportador de Bajada Grande. La ruta partiría de María Grande y le daría salida a los productos para la exportación. Y piden al obispo un representante de la iglesia para trabajar con ellos.
En 1938 se instala la fabrica Portland que va dar trabajo a mucha gente de la zona
Ese año también el Arzobispo Mons. Guilland hace su visita pastoral llegando hasta la capilla.
En 1939 encontramos al Padre Ángel Martín atendiendo esta comunidad, del 6 al 13 de agosto de ese año se ha cumplido con la novena en la Capilla y en el ultimo día se ha pedido por los pescadores y las necesidades del barrio. En el año 1943 se inaugura una escuela taller en Bajada para las obreras de ese barrio y lo dan las mujeres de Acción católica de San Miguel.
En el año 1948 hay una carta del Padre Roncaño, Párroco de San Miguel al Secretario del sindicato Obras Portuarias de Bajada Grande, pidiendo una reunión, dice aquí que el sindicato y la iglesia persiguen un ideal común, el engrandecimiento y prosperidad de este importante sector de Bajada Grande.. Las fuerzas dispersas se malogran, pero unidas se multiplican hasta lo increíble. Convencido de esto, como lo están ustedes solicito una reunión que tendría por finalidad un cambio de impresiones y la elección de una comisión Pro capilla de Bajada Grande.