Desde el lunes 7 hasta el viernes 11 se desarrolla la 121° Asamblea Plenaria del Episcopado Argentino.  En la tercera jornada los Obispos abordaron de diversas maneras y con distintas temáticas la Pastoral de los Presbíteros. Se comenzó la jornada con un momento de oración comunitaria, una “Lectio Divina” guiada por el obispo de Mar del Plata, Gabriel Mestre. Los momentos de oración en común son parte esencial de cada Asamblea Plenaria.

Para el abordaje del tema previsto, los sacerdotes Lic. Juan Pablo Dreidemie y Lic. Diego Burbridge, miembros del equipo “Jeremías” de la Comisión Episcopal de Ministerios (CEMIN), acompañaron la reflexión de los Obispos y guiaron la metodología de trabajo por regiones pastorales. El objetivo de este espacio ha sido trabajar algunas problemáticas de la pastoral presbiteral, privilegiando el diálogo fraterno y el aprendizaje fruto de las experiencias de los Obispos en cada una de sus Diócesis.

En la segunda sesión de la tarde, los Obispos realizaron la votación para aprobar el documento sobre la formación de los seminaristas. Los Obispos miembros de la Comisión redactora presentaron a la 121° Asamblea Plenaria el trabajo final. En el marco de esta tercera jornada también se dio conocer la elección de los Obispos que representarán al colegio episcopal en el encuentro que se llevará a cabo en Brasilia entre el 6 y 10 de marzo del 2023 en ocasión de la Etapa Continental de Sínodo. Los seis obispos formarán parte de la delegación argentina que contará con 39 representantes de los distintos estados de vida. De este número, 21 corresponden a laicas y laicos y el resto a sacerdotes, diáconos, religiosas y religiosos de distintas realidades pastorales del país.

Culminó la jornada de trabajo con la celebración de la Misa, que fue presidida por el presidente de la comisión episcopal de ministerios y obispo de Jujuy, César Daniel Fernández. En la misma rezaron especialmente por los sacerdotes de la Argentina y por todas sus necesidades. En la homilía el obispo Fernández expresó: “En los temas que hoy nos ocuparon, descubrimos muchas situaciones pastorales que vivimos, que derriban nuestros acostumbrados modos de pensar y de obrar… La realidad de nuestros jóvenes nos desafía, las vidas y experiencias de aquellos – en general – pocos jóvenes, que se acercan a nuestros seminarios, nos desafía aún más cuando queremos acompañar paso a paso su discernimiento vocacional”.