Los actos centrales por la Beatificación de Mamerto de la Ascensión Esquiú OFM, Obispo, tendrán lugar los días 3, 4 y 5 de septiembre. Los mismos no serán con asistencia masiva de fieles por una cuestión sanitaria, a raíz de la pandemia
Por este motivo sólo un limitado número de personas asistirá a la misa que, el sábado 4 de septiembre desde las 10.00, se llevará a cabo en la explanada del templo de San José de Piedra Blanca, en el departamento Fray Mamerto Esquiú, durante la cual se realizará el Rito de Beatificación del fraile. La mayoría de las personas que quieran participar de este acontecimiento histórico -esperado por casi un siglo- podrán hacerlo a través de los medios de comunicación o de las redes sociales. Otro tanto sucederá con los demás actos centrales que se efectuarán los días 3, 4 y 5 de septiembre, tanto en la ciudad capital como El Suncho, en el departamento La Paz.
Quienes sí podrán asistir a esta gran ceremonia, presidida por el Legado Papal, Cardenal Luis Héctor Villalba, son obispos, sacerdotes, delegaciones, invitados especiales y la prensa. Asimismo, la Municipalidad de Fray Mamerto Esquiú abrirá un espacio en el kartódromo de Payahuaico, con pantallas gigantes para quienes participarán de la celebración desde ese lugar. Todos estarán debidamente acreditados.
Antes del ingreso y a lo largo de la ruta provincial N° 1 habrá puestos de información y de control a fin de evitar desplazamientos masivos y situaciones riesgosas para la salud de todos.
Sobre su vida
En Catamarca, -Piedra Blanca-, el 11 de mayo de 1826, nació Mamerto de la Ascensión Esquiú. Sus padres, Santiago y Maria de las Nieves, y sus hermanos Rosa, Odorico, Marcelina, Justa y Josefa, configuraban una familia sencilla, trabajadora y de vida cristiana.
A los 5 años de edad, su madre lo vistió con el hábito de San Francisco, en cumplimiento de una promesa que hiciera por su restablecimiento, al nacer gravemente enfermo. Mamerto, en calidad de aspirante a la Orden, contando apenas con 10 años, entró al convento franciscano de Catamarca.
Entró en 1841 ingresó al noviciado entre los Frailes Menores de la Provincia de la Asunción en Argentina. El 15 de mayo de 1849 celebró su primera Misa. Como sacerdote se distinguió particularmente en la predicación, ministerio por el cual fue apreciado no sólo en los ambientes eclesiales sino también en los políticos.
En 1853, al pronunciar el sermón sobre la Constitución Nacional, pidiendo por la paz y la unión de los argentinos, se hace conocido en casi todos los ámbitos de la Nación.
Sus llamamientos a la paz, a la hermandad y a la colaboración civil contribuyeron a crear el clima socio-cultural para el nacimiento del nuevo Estado Federal Argentino. En espíritu de servicio y evangelización, entre 1855 y 1862, el padre Esquiú aceptó también desempeñar un papel político activo, como diputado y miembro del Consejo de Gobierno de Catamarca.
Deseoso de volver a la vida franciscana regular, obtuvo el traslado en 1862 a un convento de misiones en Tarija, Bolivia, como misionero apostólico, con el propósito de llevar una vida más austera y oculta.
Fue consagrado el 12 de diciembre de 1880, Predicó en casi todas las iglesias y capillas de Córdoba, dio ejercicios espirituales en varios lugares; y los monasterios, hospitales cárceles fueron testigos del paso y de la voz del infatigable Obispo. Creó el Taller de la Sagrada Familia, lugar de trabajo para las mujeres sin recurso, y llevó a cabo diversas obras de esta índole en estrecha colaboración con los párrocos. El Seminario de Córdoba se vio enriquecido por la labor promotora de Fray Mamerto con el restablecimiento de los estudios teológicos.
Su segundo año de Episcopado fue como “campesino” yendo de pueblo en pueblo, recorriendo la campaña. Río Cuarto, Río Segundo, Tulumba, Jesús María, Bell-Ville entre otros, fueron testigos de la presencia paternal de Fray Mamerto, quien no solo administraba los sacramentos, sino que dedicaba gran parte de su tiempo a escuchar a sus fieles.
Marcado por las fatigas apostólicas muere en plena actividad de celoso Pastor, en la posta de “El Suncho, Catamarca, el 10 de enero de 1883.
Fue declarado Venerable en 2006. El milagro propuesto para la beatificación se produjo en la diócesis de Tucumán, en Argentina, en el año 2016 en favor de una recién nacida con osteomielitis femoral grave.
El 18 de junio de 2020 el Papa Francisco promulgó el Decreto sobre el milagro atribuido a la intercesión del Venerable Siervo de Dios Mamerto Esquiú.
Con datos de https://fraymamertoesquiu.org.ar/