Con motivo de celebrarse este 25 de marzo el Día del Niño por Nacer, la Comisión Episcopal para la Vida, los laicos y la familia, quiso “una vez más invitar a acoger, cuidar y acompañar esa vida”.

A través de un comunicado se indicó que “afirmamos con la misma certeza que nos da la ciencia biológica que un niño por nacer es una vida, única e irrepetible, y posee el derecho inalienable a vivirla. Ese momento de la vida humana es uno de los más vulnerables de la existencia; y sin el cuidado de sus progenitores y de una familia, esa vida no podría subsistir.

Afirmamos y recordamos, además, lo expresado en nuestra Constitución sobre los derechos que tiene esa misma criatura ya desde el seno materno. Por eso, nos toca a todos, individuos, familia y Estado cuidar y respetar la vida desde su concepción.

Apoyados en estos principios de la ciencia y como cristianos, queremos seguir siendo anunciadores convencidos y gozosos del valor de la vida en todas sus etapas.”