Este jueves 25 en el marco de los 207 de la elevación a villa de la Baxada del Paraná, el vicario General de la Arquidiócesis y párroco de la Catedral, Mons. Eduardo Tanger presidió la misa y un momento de oración en el contexto de la pandemia de coronavirus. La intención de lo celebrado fue pedir que la Virgen “ayude a todos, creyentes y no creyentes, a sobrellevar esta prueba impensada”.

En su homilía, el P. Eduardo Tanger hizo alusión a la llegada de la Virgen, a la creación de la Parroquia en 1730 y a cómo María viene acompañando desde entonces el peregrinar no sólo de la ciudad de Paraná sino también de toda la diócesis.
En ese contexto –recordó- cómo el Primer Cura Párroco, Francisco Arias Montiel puso a la Virgen frente a dos hechos: uno de ellos fue la intervención para que se no se atacase al pueblo; y el otro, frente a una enorme sequía, que tuvo en desgracia a la Baxada, sacó la Imagen en procesión por las calles. El vecindario acompañó masivamente. Y el milagro de la lluvia llegó.
En esta ocasión, el acercamiento a María fue “para pedirle su cuidado y que ahuyente todo mal”.
Terminada la celebración eucarística, la imagen histórica de Nuestra Señora del Rosario fue trasladada hasta el exterior de la Iglesia Catedral donde se realizó una oración de pedido y súplica por cada una de las familias de la Arquidiócesis, se hizo una oración realizada por el Cardenal Esteban Karlic para el día de hoy y se dio la bendición hacia los cuatro puntos cardinales. Luego la imagen fue conducida al interior del templo.