Luego de que se conociera la decisión en torno a la renuncia gradual que propuso la Iglesia a los aportes del Estado, el encargado de comunicación de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), Pbro. Máximo Jurcinovik afirmó aseguró en Radio Corazón que “se venía pensando en esto desde abril. Como lo habían anunciado los Obispos, se generó una conversación con el Gobierno para renunciar gradualmente el aporte que hace el Estado a tres cuestiones”.
El referente de la CEA agregó que esas tres cuestiones son: “las asignaciones a los Obispos, las becas a los seminaristas y la ayuda a las parroquias de fronteras”, contó el sacerdote.
“El proceso tuvo una reafirmación en agosto y ahora, en asamblea plenaria, el obispado propuso este rumbo para dejar gradualmente los aportes y generar un fondo solidario”, sostuvo.
Respecto al fondo solidario explicó que “la idea que dejaron los Obispos es que mientras esta renuncia se vaya dando este espacio. Se busca crear instancias de solidaridad en la Iglesia para hacer frente a estos recursos. Por ahora no hay precisiones exactas de esto, pero estamos trabajando”.
El compartir los bienes tiene que ser esencial entre los cristianos. “La solidaridad es una herramienta que siempre estuvo y ahora se va a pedir para sostener esta parte”, agregó.
Finalmente aseguró que esta decisión corresponde a un “proceso que se viene gestando. Lo importante es entender el sentido de los laicos en la financiación del culto. Los fieles deben comprometerse con estas cuestiones. Tenemos que tener una clara conciencia de lo que significa sostener la evangelización. Esto no implica compartir sólo lo económico, sino también el tiempo y los carismas”, concluyó.