Este martes 29 comienza la Novena a la Inmaculada Concepción. El 8 de diciembre de 1954 el Papa Pío IX instituyó el dogma y la fiesta de la Inmaculada Concepción de María al declarar que ésta “fue preservada inmune de toda mancha de pecado original en el primer instante de su concepción por singular gracia y privilegio de Dios”.

Cada año la Novena es, por tanto, una nueva oportunidad que nos brinda la Iglesia para que redescubramos la belleza que se esconde en su persona; es decir, en alguien que nunca le ha negado nada a Dios.

“La Beatísima Virgen María fue preservada inmune de toda mancha de la culpa original desde el primer instante de su concepción por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Cristo Jesús, Salvador del género humano”, afirma la Bula “Ineffabilis Deus” sobre la Inmaculada Concepción de María.