Pablo Collaud, enviado especial de Radio Corazón a Paraguay, nos acerca una crónica de la visita del Santo Padre a nuestro país hermano.
“Ñu Guazú significa “barro grande” en guaraní.́ No le habían puesto ese nombre al predio de 120 hectáreas por casualidad. El tiempo en Asunción del Paraguay es un poco impredecible. Previo a la llegada del Papa Francisco elviernes 10 de julio, había estado lloviendo intermitentemente durante diez días. Eso hizo queel “barro grande” estuviera hecho, realmente, un barrial. Pero nada había impedido que millones de fieles esperaran la Misa que el Santo Padre oficiara allí el domingo 12. Esas incontables almas parecían reflejarse en cada uno de los casi 160.000 cocos, 25.000 espigas de maíz y 1.000 calabazas que conformaban el altar preparado para la celebración que oficiaría el Santo Padre. Una obra de arte que simbolizaba la labor minuciosa con el que cada peregrino se había estado preparando para el tan esperado encuentro”.
En el Boletín Impreso, podrá leer la crónica completa.