Reunión 11 de abril de 2012

Encontrándonos presentes, alrededor de 40 personas, debatimos en primer término sobre las nociones básicas de Pastoral Social.

A continuación de ese debate comenzamos a delinear las propuestas de acción a realizar durante el año.

Las propuestas que inicialmente trabajamos fueron:

1.- Conformación y/o cosolidación de grupos de trabajo, uno estable y un segundo grupo de contactos con los que se pueda trabajar en forma conjunta en la realización de actividades específicas.

La propuesta consiste en un primer momento retomar el contacto con las personas que ya vienen trabajando o que trabajaron vinculados a la PS con el fin de reorganizar el grupo de carácter más permanente de trabajo; y en un segundo momento comenzar a trabajar en cada parroquia con las personas que tengan vocación hacia lo social, en principio indicadas por el Sacerdote, o bien conocidas por el grupo de trabajo. Dicha actividad consistirá en la realización de un relevamiento de las instituciones, organizaciones y personas que tienen su asiento dentro del ejido de la parroquia y que realizan o pueden llegar a realizar alguna actividad vinculada a lo social.-

Este primer paso nos permitirá generar un listado de las personas que en cada parroquia están interesadas en el trabajo social y además conocer mejor la realidad y posibilidades para desarrollar actividades en la arquidiócesis.

Como forma de asegurar el cumplimiento de los objetivos podría realizarse una comunicación oficial invitando a los Sacerdotes a ofrecer un listado de la/las persona/s que podrían sumarse a realizar el relevamiento.-

Luego establecer una pequeña capacitación-orientación para el grupo que se conforme.-

Dicha capacitación debería versar sobre aspectos cardinales de PS y DSI (muy breve y sintético puesto que es solo la provisión de las herramientas básicas para comenzar la tarea).-

Asimismo destacamos la importancia de:

– Establecer una buena comunicación entre los distintos actores que trabajan en lo social.

– Lograr testimoniar nuestra unidad como cuerpo, a través del trabajo en red. Pero respetando nuestra unicidad, o individualidad, como personas o grupos autónomos que trabajan en red en la construcción del bien común.

– Ir paulatinamente generando Áreas de Trabajo, que nos permitan conocer mejor las responsabilidades y posibilidades de cada persona o grupo según sea el área a la que pertenezca. Asimismo resolvimos no establecer de antemano las áreas a crear, proponiendo su creación conforme las necesidades que surjan de las actividades de la Pastoral que vaya realizando.

– Constituirnos temporalmente todos los asistentes de esta primera reunión como nódulos (parte integrante activa) de la red que formamos con el fin de asegurar que la toda la información y las acciones sean conocidas por todos. Esta forma organizativa se iría cambiando paulatinamente con la constitución de cada área.

– Se resalto en varias oportunidades la necesidad de que se canalice en toda la red lo que se hable.

– La idea es comenzar a hacer crecer nuestra red, invitando a todas las personas, organizaciones o instituciones que conozcamos que están realizando alguna actividad vinculada a lo social.

– En principio nos pareció mejor, para comenzar con esta tarea, que nos acerquemos a las organizaciones que en nuestro barrio, trabajo o parroquia ya están realizando alguna actividad vinculada a lo social.

– Una vez hecho el contacto anotar, a que se dedican, quienes son sus autoridades y quien es la persona que nos sirve de contacto con ese grupo.

– Realizado esto, podríamos efectuar una comunicación formal, desde lo institucional, de manera personal y/o por escrito, a todas las instituciones, organizaciones y personas vinculadas a la cuestión social poniéndonos a su disposición.

Esta comunicación nos permitirá tomar o retomar un contacto más cercano con los distintos actores existentes en nuestra comunidad.-

2.- Realización de un curso semipresencial de formación en Doctrina Social de la Iglesia.

La metodología podría ser, organizar el mismo en 22 materias. En las mismas se presentaran las pautas principales de cada tema y se discutirán las claves de las mismas. Posteriormente se realizara el trabajo autónomo. Incorporando el trabajo de campo como elemento central de curso.-

Para el dictado de la misma se podría realiza convenio con Centro de Estudio de Doctrina Social de la Iglesia «Juan Pablo II»(CEDSI) y con el fin de ampliar la orbita de trabajo, se podrían realizar convenios con las demás diócesis de la Región Litoral.-

Específicamente dictaríamos una Diplomatura semipresencial en Doctrina Social de la Iglesia estructurada de la siguiente manera:

Duración: Dos (2) años.

Dictado por año: 8 (ocho) encuentros presenciales intensivos, realizados uno por mes.

Trabajo autónomo: Se deberá cumplimentar todas las actividades propuestas por el coordinador y los docentes.-

Trabajo Virtual: Como complemento de cada actividad se desarrollara una instancia de contacto virtual.-

Los destinatarios del presente curso podrían ser: Público en General, Agentes Pastorales; Sacerdotes, Miembros de Sindicatos, Políticos, Docentes, etc.-

Costos: Aproximadamente 16 (dieciséis) cuotas de $100 (pesos sien).-

Cumplido primer año se extenderá el titulo intermedio de «Animador de Procesos de Desarrollo Comunitario con orientación en Doctrina Social de la Iglesia». Finalizado el segundo año se accede al título de «Diplomado en Doctrina Social de la Iglesia con orientación en Liderazgo Público y acompañamiento en Procesos Comunitarios de Aprendizaje».

– Aquí resaltamos la necesidad de realizar un acabado discernimiento para poder actuar con mayor eficacia en la construcción del bien común.

3.- Realización de cursos cortos de formación.

Como servicio prestado a quienes lo soliciten y también como mediaciones que permitan el acercamiento de todas las personas tanto a la Pastoral Social, como a la Doctrina Social de la Iglesia.-

4.- Participar de las video conferencias realizadas por la Red Latinoamericana de Doctrina Social de la Iglesia.

Como otra forma de capacitarnos y especialmente aprovechando la riqueza que nos puede dar le hecho de tomar contacto con personas de distintos lugares de América Latina que se encuentran trabajando, en la teoría y praxis de las cuestiones sociales.

5.- Realización de Eventos Significativos.

Organizarnos para que al menos una o dos veces al año se realice, por ejemplo, un encuentro de todos los actores de la vida social.

Esta actividad puede ser de muchísima relevancia e impacto en la comunidad, lo que nos ayudaría en la realización de las otras actividades que nos propusimos llevar adelante.