A través de la Oficina de Prensa del Arzobispado se brinda la siguiente información en torno a la inquietud transmitida desde distintos sectores sobre la situación del Oratorio  (Capilla) y atención religiosa en el Hospital San Martín de Paraná.

 

  • En el mes de julio, en el sector central del Hospital, se produjo un imprevisto movimiento estructural que impuso el cierre y desalojo preventivo de los servicios de Ginecología y de Gastroenterología, allí situados.
  • En razón de la imperiosa necesidad de seguir atendiendo a los muchos pacientes que concurren a dichos servicios, desde el Ministerio de Salud se solicitó con la mediación de las autoridades del Hospital, al capellán del mismo –por su intermedio al Arzobispado de Paraná– afectar el espacio de la capellanía para poder continuar con la atención de la salud. Se considera para ello que no hay espacios disponibles en el Hospital, en particular por la pandemia que nos aflige.
  • Se firma para ello durante el mes de julio, un Acta Acuerdo por la dirección del Hospital y el Arzobispado con precisos términos.
  • En primer lugar queda asegurada la atención religiosa del Hospital a través de sus capellanes.
  • El Ministerio de Salud, a través de la dirección del Hospital, se compromete a iniciar los trabajos de refuerzo en las estructuras que permita devolver a la capellanía un nuevo espacio para el Oratorio y vivienda del capellán.
  • Que el traslado, con independencia del cierre temporal ya descripto, había sido acordado entre las mismas partes, porque brinda al servicio de salud un espacio de mayor amplitud y al Oratorio un lugar de mayor centralidad y acceso facilitado a quienes concurran. Las razones edilicias mencionadas forzaron un cierre y traslado anticipado.
  • El Hospital se hace cargo de los costos de traslado y emplazamiento del Oratorio en el nuevo lugar, así como del refuerzo de las estructuras, apurando para ello las gestiones administrativas pertinentes.
  • De acuerdo a lo dispuesto por el canon 1224 del Código de Derecho Canónico, el Ordinario autorizó el uso de lo que era el Oratorio para un uso ajeno al culto religioso.
  • En todo momento, frente a lo imprevisto, hubo permanente diálogo y consulta, por lo que confiamos y rezamos al Señor, salud de los enfermos, para que en breve plazo la capellanía pueda seguir prestando su servicio desde un lugar físico, para la atención religiosa y también humana, con el servicio del ropero y elementos de asistencia a las personas internadas en el nosocomio.