Gran cantidad de abonados a esta empresa han manifestado su profundo desacuerdo con la decisión de quitar de la grilla la señal religiosa EWTN. El canal es gratuito pero la empresa quiere que los usuarios paguen un decodificador y el paquete digital para recibirla. Así lo confirmó el sacerdote Rubén Bellante, titular del Departamento de Comunicación del Arzobispado de Rosario a Radio Corazón.

Bellante, quien es además comunicador social santafesino relató cómo fue la estrategia del Grupo Clarín, que terminó con la señal católica fuera de la grilla básica que contratan sus abonados, y que cuenta además con antecedentes en otras ciudades, donde también despertó polémicas con las autoridades eclesiásticas. «Cablevisión ya está haciendo esto hace un tiempo en varios lugares del país, como Mar del Plata y La Plata», manifestó, mencionando que en este último caso también hubo conflicto con la arquidiócesis.

Reclamo en Facebook

Mientras corre el reclamo formal presentado por el Arzobispado, por su parte los fieles se pusieron en campaña y habilitaron una cuenta de Facebook llamada «Queremos ver EWTN por Cablevisión» donde invitan a sumar sus reclamos: «Pedimos a todos los abonados que escriban pidiendo el reintegro del canal. Es importante reclamar, porque si no ejercitamos nuestros derechos no vamos a ser escuchados», expresan los clientes en ese perfil de la red social.

«La señal católica EWTN es la más grande del mundo y la más antigua con 35 años. Es un ícono, transmite en español, inglés y alemán, y tiene una cobertura muy grande en América Latina. Es una injusticia lo que han hecho, porque es una señal gratuita y nuestros televidentes –en su mayoría, jubilados- no pueden pagar eso», se lamentó Bellante.

«En junio –prosiguió- nos llegó el rumor de que lo iban a sacar de la grilla de Rosario, y cuando nos comunicamos con la empresa nos respondieron que lo iban a pasar al digital», sistema que requiere de un pago extra por parte del usuario.

«De manera inconsulta lo sacaron del sistema analógico, siendo que es la única señal católica en Cablevisión, y lo pusieron en el digital, que significa para el abonado pagar 300 pesos por el decodificador y luego adquirir el paquete digital que está en 490 pesos por mes», describió el sacerdote.

En este sentido, el sacerdote adelantó que proseguirán por todos los medios posibles con el reclamo, ya que entienden que la firma está violando derechos de sus clientes con esta intempestiva decisión. «Hay abogados católicos que están armando presentaciones y denuncias por el lado del derecho del consumidor, otros están pensando en enviar cartas documento personales, y también existe un petitorio grupal que cuenta ya con cientos de firmas. Así también pedimos la reunión personal para que concurramos junto al Arzobispo a hablar con el gerente», especificó. Por el momento no hay una respuesta formal de la firma, lo que agrava la situación y caldea los ánimos tanto de las autoridades como de los feligreses.